//Proyecto_02.2 >     Autistic Cyborg Artifacts: 01.- Gaze (2025)

Reconfiguración y ampliación del artefacto nº1 de mi tesis AUTISTIC CYBORG, presentado en la exposición SEEING: An Eye and a Box una iniciativa de ECaBox - Centro de Regulación Genómica (CRG) y NAKED SPACE, en colaboración con el CC Convent Sant Agustí.


Este artefacto es una intervención crítica y satírica a la extraña obsesión por un tipo de contacto ocular específico como estándar necesario de vinculación social. Una regla impuesta por la sociedad neuronormativa y no-disca que insinúa que hay una única forma “correcta” de mirar y que esta es necesaria para una comprensión social adecuada. Una norma que excluye a las personas que se salen de este marco, como pueden ser las personas autistas o con discapacidad visual, invisibilizando sus formas de comunicación y vínculo.

Nacida de mi experiencia autista, esta crítica se extiende a vivencias compartidas no solo por otros autistas, sino por todas aquellas personas con una mirada o visión considerada “defectuosa” según el paradigma médico patologizante, que prioriza la corrección de estas diferencias para lograr una asimilación a la norma establecida en lugar de velar por nuestro bienestar. En ciertos contextos, a las personas ciegas se les enseña a “dirigir la mirada” hacia sus interlocutores apoyándose en su capacidad auditiva, por el simple hecho de complacer los códigos sociales del interlocutor vidente,  aunque esta práctica sea claramente insensata para quienes literalmente no pueden ver, evidenciando así la imposición de una norma visual dominante. Estas situaciones convergen en una realidad común: independientemente de cual sea nuestra diferencia frente a la norma, todas las personas con discapacidad nos vemos obligadas a adaptarnos para no incomodar a quienes no la tienen.

El wearable está equipado con un dispositivo de electrooculografía que analiza los datos en tiempo real para detectar el parpadeo o desviación de la vista. Cuando se registra alguno de estos, una luz intensa colocada alrededor de los ojos se enciende y suena un pitido chirriante en forma de alarma para castigar al usuario, haciendo que cualquier movimiento ocular resulte incómodo. Este gesto se concibe como un hacking social y cultural que cuestiona y subvierte la regla dominante, revelando cómo estas normas excluyen a quienes no encajan en su rígido modelo, y evidenciando el control y vigilancia a la que someten nuestros códigos y corporalidades disidentes.

A través de esta experiencia extrema, se pretende simular y generar conciencia sobre la incomodidad o dificultad que muchas personas sienten al mantener contacto ocular prolongado, promoviendo una mayor comprensión y aceptación de las diferencias en la comunicación no verbal. Al subrayar la arbitrariedad de considerar el contacto ocular como un estándar de interacción social, el dispositivo invita a reflexionar sobre la presión ejercida por la sociedad neurotípica y sugiere que otras formas de comunicación pueden ser igualmente válidas y respetables, fomentando una mayor flexibilidad en la comprensión de las diversas maneras en que las personas conectan entre sí.